Con nuevos bríos

   La verdad que últimamente estoy de un vago que ni me reconozco, han sido tiempos muy duros y entre el invierno que miraba por la ventana y veía llover y ese frío que se te metía hasta los huesos, las poquitas ganas de salir y ver a nadie, a no ser que fuera un compromiso de una cena o similar, que se ha pasado volando y sin pena ni gloria, lo mismo que la primavera... en fín que no sé si es porque lo que va de año ha sido muy complicado, con muchos sobresaltos y disgustos y que una va cumpliendo años y también se nota,(ainsssssssssssssss), el síndrome del nido vacío (que también puede ser...os echo de menos...) pero bueno,  poco a poco mi vida y la de mis seres queridos se va arreglando y voy viendo la luz al final del túnel, o al menos eso parece.... y aquí estoy, respirando hondo e intentando retomar mi blog donde lo dejé, con una sonrisa y unas ganas inmensas de vivir, de ser feliz, de enamorarme, de comerme el mundo y no dejar que sea él el que me coma a mi...veremos cómo se nos da el verano